Disponer de tiempo para nosotros siempre será una satisfacción.En esta ocasión me hice un espacio en la agenda y es un placer compartirles lo que esta puesta en escena me dejo para pensar.
Lamentablemente su ciclo en cartelera terminó,escrita por Juan Bey e interpretada por Oscar Piñero,se trata de un monólogo totalmente revitalizado a lo que estamos acostumbrados a ver por otros medios o incluso en este dónde cada vez el teatro experimental gana terreno y sobretodo las personas se van adaptando a ser partícipes de ello y no sólo quedarse en el papel de espectadores siendo invitados a ser parte,sentirlo de verdad.
Ahora bien,abordando la temática planteada: es una cadena de sensaciones,emociones y recuerdos ya que este personaje nos habla del cómo ve y concibe la vida dónde todos somos unos grandes mentirosos,sí, unos “hijos de la chingada” que no estamos dispuestos a reconocerlo porque “el otro/el de al lado” puede descubrirnos y entonces ya no seríamos las personas correctas,con dominio de su vida y felicidad que solemos proyectar ¿cierto?.¿Qué pasa cuando salimos de los esquemas del cómo y con quién deberíamos ser felices?,¿qué nos ocurre cuando públicamente tenemos que callar la mayoría de nuestros pensamientos por no quedar “mal” aunque sea en un contexto lleno de desconocidos?,¿porqué debemos mostrarnos siempre buenos,condescendientes y amables?.Ante nosotros no podemos mentir y eso lo sabemos cada que nos vemos a un espejo y somos capaces de reconocernos o no.
Saber quienes somos y que esperamos de la vida,de nuestra vida es en sí lo que el mundo esperaría de nosotros,pero ¿cuántas veces lo que ayer nos enamoraba hoy es objeto de hastío o incluso peor de un aburrimiento fatal?.Nos esforzamos tanto en seguir una línea dónde debemos llenar el checklist de lo que se espera de nosotros que olvidamos vivir,sentir y sobretodo sernos fieles a nosotros mismos.En base a ello somos mentirosos por todo y para todo aún sin realmente necesitarlo,como si el evitar la realidad de lo que sabemos o venimos presintiendo cambiara el escenario y a veces sí,pero parece que es por ello que nos encapsulamos en relaciones (como las de pareja) dónde a pesar de saberlo todo muerto insistimos en continuar, ¿porqué y para qué?,porque como nos develan: queremos ese status,ese sentirnos amados,deseados y “llenos”,¿porqué no somos capaces de decir que tal vez solos seríamos incluso más felices?,¿ porqué tal vez ni siquiera lo hemos intentado nunca?
En resumen es un monólogo que nos invita a la auto-crítica,a pensar que queremos,que somos y que hacemos en dónde justo estamos parados.Lo cual me lleva a cuestionarme y cuestionarlos a ustedes así:¿Eres transparente?,¿cuándo fue la última vez que te viste al espejo y de verdad te reconociste?,¿es esa persona con la que estás compartiendo tu tiempo lo que de verdad buscas o estas conformándote?,¿quién eres?
Les dejo las siguientes ligas para que se den una idea de esta puesta en escena y si hay otras interpretaciones no duden en asistir:
Y una entrevista a este actor que sin duda espero volver a ver haciendo su arte:
Comentarios
Publicar un comentario